Sacrificar terneros, vírgenes o gente que te cae mal es algo del gusto del Maligno y sin duda tendrá una recompensa para ti, pero ni siquiera Él puede decir no a un bikini. Por sólo 44 euros uno (o una, más bien) se puede hacer con este bikini satánico que usa el poder del sol para marcar un pentagrama en el pecho, el punto anatómico más importante del ser humano porque contiene el corazón (para bombear sangre), los pulmones (para fumar) y las tetas (de las tetas no diga nada porque son importantes en sí mismas y justifican la existencia del ser humano).
Es una prenda imprescindible para toda Sacerdotisa del Mal profesional que se tome su trabajo en serio y haya escogido esta opción por una cuestión de sensibilidad y no por la absurda creencia de que en el Infierno no suena Enya. Por lo que sé, allí suena tanto Enya como todos los participantes de Eurovisión de todas las épocas en un bucle interminable, y cuando le toca a ABBA Su Excelentísima Maleficencia sube el volumen. De ahí lo de Excelentísima Maleficencia.
Hazte con el tuyo, estas a solo un clic
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